Otra historia:
Un misionero estaba predicando el evangelio a aborígenes en el corazón de África y, para hacer la catequesis menos abstracta y más atractiva, dada la imaginación de sus oyentes, se había traído de su tierra en Europa una serie de grandes láminas en las que estaban plasmados con vivos colores los principales dogmas de su predicación. Aquel día la lección era sobre el infierno, y contaba para la ocasión con una lámina especialmente dramática, ya que en ella el artista había dibujado los tormentos de los condeados con realismo dantesco en su abundancia y variedad. El misionero comenzó su sermón con todo fervor, y en el momento oportuno desplegó la lámina y subió el tono de la voz y los comentarios para conseguir el mayor efecto con la unión de la palabra y la imagen. Pero quedó desconcertado cuando se encontró con que, al ver la lámina, sus oyentes comenzaban a hacer comentarios entre ellos y a reírse de buena gana. Perdió el hilo de su sermón y preguntó sorprendido y enfadado a su primer catequista que estaba sentado en primera fila y se había reído tanto como cualquiera: "¿Se puede saber por qué os reís ante una cosa tan seria?" Y el catequista le contestó de buen humor: "Pero ¿no se ha fijado usted, Padre? ¡Todos los que hay en el infierno son blancos!"
Tomado de: Carlos G. Vallés, SJ Salió el sembrador...
Tomado de: Carlos G. Vallés, SJ Salió el sembrador...
4 voces:
ME HACE RECORDAR DE NUEVO A LOS ANGELITOS NEGROS DEL POEMA
Esto muestra una vez más la diversidad humana. No siempre los preceptos de una cultura son validos ´para otra.
Sí, tampoco el concepto del bien y del mal.
Besitos.
Your site is on top of my favourites - Great work I like it.
»
Comuníquese: ¡Hágase sentir!