La Voz del Silencio: Un par de sueños :)

Debería cambiar el nombre de este blog a "La voz del sueño" o algo similar, ¿no les parece, muchachos? Jajajajaja. Bueno, vamos a seguir :).

Primer sueño

Estaba en una especie extraña de habitación que no sé bien a qué pertenecía, si a un barco o a un edificio pequeño. Lo cierto es que me encontraba a un nivel más abajo de la "Planta Baja", y sin embargo, podía mirar a través de la ventana el paisaje. No estaba sola: nos encontrábamos un grupo de muchachos, entre ellos Óskar, dentro de aquel lugar. Al observar la ventana observé que había una ola gigantezca que se nos venía encima y que nos inundaría por completo. Junto a mi compañero (no sé quién sería en mi vida real) buscamos rápidamente un salvavidas y subimos a la superficie (cuestión de micro-segundos) y la ola nos inundó. Después el sueño se re-hizo de alguna forma: de alguna forma todos estaban alertados y todos sobrevivieron con sus salvavidas, pero sus cuerpos no eran sus cuerpos: eran como elementos inanimados. En esto, me desperté.

Debo añadir que me llama la atención este sueño porque la idea de la catástrofe está presente desde hace dos años, al menos. Cada vez se acerca más la ola, el huracán o lo que sea, pero ésta es la primera vez que me sobrepasa.

Segundo Sueño

Lamentablemente, no lo recuerdo bien. Había algo así como una representación de mí, mis circunstancias o no recuerdo qué. La forma pictórica sería casi como un reloj o una carta astrológica, pero sin aspectos: en la cumbre (arriba del círculo) se encontraba el proceso de crucifixión representado por Cristo en la cruz (había otras cosas, mas no las recuerdo). Sabía que esto estaba relacionado con la forma en que en mí se cerraban los ciclos de mi vida, pero por más que lo intenté, no logré encontrarle un sentido dentro del sueño.

Con el fin de comprender algo de esta representación, me dirigí -acompañada de Mariana- con un terapeuta: al parecer, lo conocía desde hace un tiempo atrás. La consulta comenzó (busqué bolígrafo y papel para anotar todo aquello que me resultara importante: por alguna razón, aquello se me hacía vital). Mariana dio una opinión sobre algo mío, no recuerdo cómo metió en el paquete alguna tía, prima, viuda o no sé qué que se relacionaba con mi persona, pero la detuve en seco porque sentía en aquello la posibilidad de interpretaciones interesantes, mas no necesariamente relacionadas conmigo, que era realmente lo que me interesaba. Entonces habló el señor terapeuta (era de mediana estatura, blanco, delgado, con barba) y me comentó algo así como: me ha gustado mucho tu evolución en estos dos años; antes hubieras incorporado el gráfico como gráfico, ahora lo incorporas como emo-sentimientos.

Y pluf, me desperté.